Comprender: Bizcocho de naranja, en 6 pasos

Bizcocho de naranja. Imagen: qmbecanada.com

Bizcocho de naranja.
Imagen: qmbecanada.com

La receta

(Todas las medidas son en cucharadas soperas, para dos personas)
1 huevo
1 naranja
1 cucharada de azúcar
1 cucharada de aceite
3 cucharadas colmadas de harina
Un poquito de sal
3 cucharadas de leche
1 cucharada rasa de levadura en polvo
Mucho amor 🙂

El proceso

1 – Rallar la peladura de la naranja.
2 – Pelar la naranja y conseguir los gajos sin ningún tipo de piel, solo la carne. Para hacer esto se pela la naranja profundizando en el corte de tal forma que la piel externa de los gajos quede con la piel blanca que se va a tirar. Con la naranja entera, separar la parte carnosa de los gajos cortando al lado de la piel que los separa.
3 – Triturar; que no batir; la ralladura, los gajos, el azúcar, el aceite, la harina y la leche. Todo menos la levadura.
4 – Agregar la levadura y con una lengua de gato o una cuchara revolverla con la mezcla. Y dejar reposar unos 5 minutos.
5 – Poner en recipientes aptos para el microondas.
6 – Poner en el microondas a máxima potencia entre 6 y 7 minutos.

La historia

Bizcocho de naranja. Imagen: qmbecanada.com

Bizcocho de naranja.
Imagen: qmbecanada.com

Tras mi éxito con el bizcocho de chocolate, tenía que probar algo nuevo.
De nuevo la receta era solo mía en cuanto a los ingredientes y las proporciones.
En mi primera experiencia comprendí la función de algunos de los componentes.
La harina y el huevo son fundamentales.
Obviamente, también lo es la materia prima que le da nombre y sabor al bizcocho.  En este caso la naranja.  Si quería conseguir “mucho sabor” y “mucho color” a naranja debía usar todo aquello de la naranja que le es característico.  La ralladura de los cítricos la ha visto usar en otros platos.  Y cuando he hecho mojitos u otros cócteles la piel estrujada aporta un aroma muy intenso.  Para mi bizcocho quería un aroma intenso.
No me atreví a prescindir del aceite, ni del azúcar, ni de la levadura.  Supongo que esas son esas supersticiones de las que uno nunca se desprende, tenía miedo al fracaso por prescindir de algo que no me suponía mucho coste
Creo que el aceite es fundamental.  También el azúcar, claro que lo es.  Y la levadura, también, supongo.  No lo sé con seguridad, pero no lo pongo en duda.  Por eso es una superstición; con ellos funciona, sin ellos no estoy seguro.  Los mantengo.
Si hago demasiados cambios analizar los antecedentes del resultado puede ser complicado.
Lo de la sal, pues no sé.  Para poner algo exótico.  Cuando me preguntan digo que para intensificar el sabor.  No creo ni que se note.  Pero hay mucho sibarita suelto y es un mercado nada desdeñable.

El motivo

Conseguir este bizcocho significaba que lo que había visto en mi primer bizcocho de chocolate ahora lo había entendido.  Había sido capaz de pasar de hacer algo porque lo había visto, a hacer algo porque entendía el proceso.
Un punto de test fue la textura de la mezcla.  La naranja aportaba mucha agua por eso aumenté la cantidad de harina, y creo que no fue suficiente, también rebajé las cucharadas de leche.  El objetivo es que en conjunto el resultado de la mezcla sea un líquido muy espeso.
El bizcocho de chocolate era la síntesis de todo lo que había visto.  El de naranja era el análisis de porqué ese de chocolate fue un éxito.  Si sabía por qué podría repetirlo hasta la saciedad con éxito.  Y el éxito es dulce, más que los bizcochos.

El resultado

Bueno, muy bueno.
De sabor exquisito e intenso.
Sin embargo la textura esponjosa no fue tan buena como en el primero.
¿Tal vez más harina?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *